domingo, 21 de marzo de 2010
La gratuidad de los servicios
Interesante participación por parte de Gerard Costa en La Vanguardia a cerca de la gratuidad de los productos o servicios. Siempre he sido de la opinión que sólo uno valora lo que se le ha dado cuando ha pagado por él. Ese aparato de música que compré después de trabajar un verano o un bolso que guardo con cariño después de invertir mis ahorros dando clases de inglés... El consumidor nunca llega a valorar lo que le es gratuito, nunca llega ser tan feliz como cuando paga para tener lo que él valora dice Costa. Estoy de acuerdo con esta opinión. Parte de mi trabajo de investigación va a ser publicado en breve y en ella comento este aspecto. creo que cualquier servicio que se ofrece en la farmacia, debe hacerse pagar, es una manera de valorar el trabajo que se hace. Pagar por mirar la tensión, pagar por mirar un azúcar, etc, estos servicios no sólo tienen un coste para la farmacia (coste materia prima) si no que también son tiempo empleado por un profesional. ¿A cuántos de Uds. no les cobran por chequear el estado del motor del coche?, ¿Cobran por hacer los bajos en el pantalón?, y lo ven normal, no? Entonces, porque cuando una persona que ha estudiado 5 años de licenciatura no pueden hacerlo? Vas al dentista y sólo por abrir la boca son, parodiando el anuncio, te informan que: son 10.000. La gratuidad sirve para "captar" al usuario con este reclamo. Existen muchas otras maneras de fidelizar, como ofrecer un servicio de atención al cliente excelente, ofrecer una serie de servicios diferenciadores. Sólo así dejaremos de desprestigiarnos y de entrar en la guerra de "en la de al lado de casa me la miran gratis, me parece un abuso".
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario